Rinoplastia: mitos

La rinoplastia, conocida coloquialmente como «cirugía de nariz», es uno de los procedimientos cosméticos más populares que se realizan en Clinic. Desafortunadamente, muchas personas son víctimas de ideas equivocadas muy difundidas sobre este procedimiento.

Siga leyendo para conocer más sobre algunos de los mitos más comunes en torno a la rinoplastia.

La rinoplastia sólo se hace por vanidad

Si bien es cierto que muchas personas se someten a este procedimiento para mejorar y realzar su apariencia personal, la vanidad no es la única razón para someterse a una rinoplastia. De hecho, la rinoplastia se realiza frecuentemente para corregir lesiones o trastornos nasales traumáticos, más comúnmente tabiques desviados. Los desórdenes nasales pueden conducir a una serie de problemas de salud importantes si no se tratan, incluyendo apnea del sueño y problemas respiratorios.

La rinoplastia es dolorosa

Contrariamente a la creencia popular, el dolor que se siente después de una rinoplastia es mínimo. En algunos casos, los pacientes pueden experimentar alguna hinchazón o moretones menores durante algunos días después del procedimiento. Sin embargo, estos problemas suelen ser leves y pueden tratarse con antibióticos o analgésicos de venta libre. En cualquier caso, estos efectos secundarios no tienen un efecto duradero, especialmente cuando se tratan adecuadamente.

La rinoplastia puede darme una nariz perfecta

La rinoplastia, como cualquier cirugía plástica, tiene sus límites. Antes de la cirugía, un cirujano plástico le mostrará una representación de cómo puede ser su nueva nariz. El cirujano tendrá en cuenta su estructura ósea, así como sus otros rasgos faciales, para que todos sus rasgos se vean equilibrados y naturales. Aunque muchos pacientes se someten a este procedimiento anticipándose a la perfección, se les aconseja que tengan expectativas realistas sobre lo que este procedimiento puede hacer por ellos.

La rinoplastia puede ser realizada por cualquier cirujano

Es cierto que cualquier cirujano plástico licenciado puede realizar una rinoplastia. Sin embargo, la nariz es complicada. Contiene una gran cantidad de hueso, cartílago y otras características importantes, por lo que no es aconsejable acudir a un médico que no se especialice en rinoplastia. Cuando busque un médico, busque un médico que esté certificado por el Consejo, que tenga una amplia experiencia y que se especialice en cirugía estética.